La noche del sábado estábamos en la feria con nuestro nene, paseando y disfrutando de la buena temperatura, cuando nuestros ojos buscaron la Luna, como casi cada noche. No hay noche en la que no busque la Luna en el cielo y me quede perpleja un rato observándola. Me parece tan preciosa.
El caso es que el sábado la miré y creí que una nube o algo extraño la tapaba, pero con el barullo de la gente y la feria no le di importancia.
Al cabo del rato mi marido dijo: "Eso que tapa a la luna es una nube? Hay hoy un eclipse?". Miré la luna y en ese momento se notaba ya clara la sombra de la Tierra sobre ella. Mi suegra nos confirmó que habían anunciado el eclipse en las noticias. Claro, nosotros vivimos a veces quizás demasiado desconectados del mundo ya que no solemos ver la televisión, pero aún menos en estos días de vacaciones.
Me quedé observando la belleza del fenómeno mientras oía como mi marido se lo enseñaba a nuestro nene y le explicaba qué producía ese fenómeno tan especial ejemplificándoselo con unas piedras.
Nunca dejará de sorprenderme y maravillarme la Naturaleza.
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